domingo, 8 de junio de 2008

la nube de mi cuarto


Comienzo a colocar las cosas del curso. intento atrapar los posit y otros recortes que vuelan en torno a desde hace tiempo, son tiques de cosas que un día regale, entradas de cine que me recuerdan a días que ya pasaron, todos los recuerdos seguían volando a mi alrededor.
llega la hora de atraparlos de coger la grapadora y diseccionarlos como si de escarabajos se tratara a una libreta de dos rayas, una de esas libretas masoquistas que siempre guardo y que nunca debería volver a ver.
si lo confieso existen mas cosas de las que os enseño, lo siento todos tenemos nuestros secretos y por eso sigo pudiendo sorprender.

2 comentarios:

Nadie dijo...

el masoquismo del alma como un día lo definió nada, puede que nos haga más fuerte o puede que un día enjaulado ya le niño de nuestra alma, matados los monstruos de nuestros armarios y cayendo las hojas de nuestras primaveras, nos podamos sentar en una cafetería, y sacar esos cuadernos de hojas inconclusas, que seguiremos guardando atadas con una goma como quien guarda el mayor tesoro, y ese día y solo hasta ese día reírnos de las locuras que hicimos de los errores que casi con gusto cometimos, y vanagoliarnos de haber aprendido, de asentar las cabeza de olvidar las llaves de nuestro castillo del aire...

Nadie dijo...

y ese día será de verdad el día que matemos lo que quedaba de buenos en nuestra alma. Porque habremos dejado de ser niños y sin ser niños dejamos de ser curiosos y sin la curiosidad lo perdemos todo.
por eso los guardo y los miro para ver que me siguen doliendo, que sigo cometiendo una y otra vez los mismos errores y que a la vez que los cometo sigo teniendo esos 7 años o esos catorce que siempre tuve, que siempre espero tener...